martes, 4 de octubre de 2016

¿En que me puede ayudar el marketing?


Soy contador, ¿qué tiene que ver el marketing conmigo?
Soy médica, ¿qué tiene que ver el marketing conmigo?
Soy escritor, ¿qué tiene que ver el marketing conmigo?
Trabajo en relación de dependencia, ¿qué tiene que ver el marketing conmigo?

Tiene que ver TODO.

Querido lector, si te digo que el mundo actual se rige por un duro y descarado (pero del que nadie habla) superficialismo, no te estoy aportando ningún conocimiento nuevo. El gran problema es que no hemos sido capaces de entender hasta qué punto esta manera superficial de juzgar las cosas que arrastra la sociedad afecta a nuestro entorno más personal. Y si acaso si lo hemos comprendido, no hacemos nada para que esta realidad juegue a nuestro favor o al menos no nos afecte negativamente.

Hace algunos meses, mientras dictaba un pequeño taller, explicaba al público que, aunque no me interese meterme en un mundo dominado por las marcas, no puedo mantenerme ajeno al mismo. Es el mundo en el que vivimos y si no despertamos y  levantamos la cabeza no vamos a ver como los juicios que hace la gente sobre las marcas, los profesionales, las empresas, los empleados, las personas que conoce afectan nuestros ingresos, nuestros entornos, nuestro rendimiento, nuestra vida.

Mi querido doctor, abogado, empleado público, cuentapropista, escritor, necesitas entender de marketing. Las personas que te contratan, te consultan, buscan tu asesoría, compran tus libros, tienen una percepción particular de ti, de tu manera de trabajar, de tus resultados. Y lo que es más grave, a veces, esa percepción tuya la fabrican ¡antes de contratarte! ¡Antes de siquiera estrechar tu mano por primera vez!.

Necesitas decirle a tu “público objetivo” (tus pacientes, tus clientes, tus empleadores, tus lectores, etc.): “¡AQUÍ ESTOY YO! Y soy esto:”

Porque, créeme, si tú mismo no te fabricas tu marca y se la comunicas al público, el público va a ser quien va a fabricarla y muchas veces —la mayoría de las veces— el público es cruel.

Entonces, ¿eres doctor? Es hora de que decidas qué imagen de ti quieres que tengan tus pacientes y los que no han sido tus pacientes aún. Son los que  pagan las órdenes que luego te darán de comer. 

Necesitas que te busquen y lamentablemente brindarles un buen servicio, muchas veces no es suficiente en esta sociedad.

¿Eres asesor, contador o profesional independiente? Necesitas decirles a tus posibles clientes por qué tienen que contratarte a ti y no a cualquiera de los miles de consultores a los que pueden acceder abriendo un buscador de internet.

¿Eres escritor, ensayista? Tienes que levantarte de la silla y decirle ahora mismo a la gente por qué tiene que leerte, por qué mereces hacerte conocido.

Y si eres un empleado en relación de dependencia, quizá necesites mucho más del marketing del que crees. Pues casi todos los rubros tienen clientes exigentes, pero los tuyos, mi estimado empleado fiel y trabajador, son los más exigentes. Tus clientes son los mismos que te contrataron y que firman tu recibo cada mes. Son aquellos a los que vendiste tu marca personal cuando les presentaste tu currículum y les hablaste de ti mismo en la entrevista laboral inicial. Recuerda que contrataron tu servicio y que necesitan una razón para seguirte eligiendo mes a mes.

Conclusión. Cualquiera sea la manera en la que te ganas la vida, puedo apostarte mis entradas mensuales completas a que necesitas del marketing. Algunos pueden permitirse pagar una asesoría comercial que los guiará en su caso particular (esto es lo que naturalmente yo recomiendo), otros harían bien en, al menos, adquirir conocimientos básicos sobre marketing (segmentación de mercados, posicionamiento conceptual, ventaja competitiva, estrategias de precios, por mencionar solo algunas herramientas) que los ayudarán a no dejarse arrastrar así como así por la ola consumista y competitiva del mundo actual.
Gracias por tu atención. Nos encontramos próximamente.




No hay comentarios:

Publicar un comentario